Esta "Machinimia" fue producida con el juego Second Life. Para crearla Mandy Marseille necesitó la colaboración de cinco contactos, cinco horas de diseño y un día de edición y renderizado.
El deseo de crear es, en los Nativos Digitales, una característica diferenciadora básica. Son adeptos a las producción de obras digitales relacionadas con Internet o lo serán rápidamente, apenas se les de la oportunidad. Les encanta por ejemplo, diseñar sitios, animaciones en flash y retocar imágenes. Cada vez más, sus juegos son a la vez, como un soft de aplicación, porque traen herramientas como ‘editores de niveles’, permitiendo así que, quienes quieran, puedan practicar ‘modding’, es decir, intervenir en el diseño mismo del juego, creando no sólo al personaje que los representa, sino también universos totalmente nuevos -como en Los Sims: casas, muebles, ropa, situaciones y demás, de un mundo que no habitan- o inventando íntPublicar entradaegramente un juego de su propia autoría. Esta acción transformadora tiene muchos seguidores. Ellos idean desde niveles adicionales para un soft comprado hasta juegos completamente nuevos y distintos que luego pueden vender en forma independiente en Internet.
Estas habilidades, generalmente colaborativas –varios ‘jugadores-diseñadores’ en red-, son recompensadas en países desarrollados con premios de hasta ¡un millón de dólares!
Otra corriente dada a conocer en el 2002, con numerosos adeptos en Internet y una legión creativa detrás es la ‘Machinimia’. Esta implica la creación de películas (films de animación) a partir de juegos interactivos, gracias a las herramientas mencionadas. A estos creadores se los llama ‘Machineastas’. En muchos casos, el volumen de software ‘machinimia’ anexo a un juego, es igual o mayor al que la empresa desarrolladora del videogame fabricó. Lo llamativo de todo esto tiene que ver con una constante: los nativos demandan herramientas poderosas que aprenden a usar por si mismos y enseñan a usar a otros.
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